Pocos conceptos nos vamos a encontrar que sean tan difíciles de definir y que provoquen tantas controversias como el término Liderazgo. Es por eso que
no voy a tratar de definirlo exactamente, pero por decir algo que nos ayude a entendernos, lo calificaría como la capacidad que tiene una persona
para influir en otras para que hagan cosas.
Pero, ¿Por qué una persona obedece las indicaciones de otra? Básicamente porque la segunda tiene algún tipo de influencia en la primera. Esta influencia
puede ser de varios tipos:
- La influencia basada en el castigo. En la cual el individuo sigue las indicaciones de otro para no recibir un castigo. Es una influencia reactiva.
La persona sigue las indicaciones por temor a…
- La influencia basada en la legitimidad. En la cual el subordinado reconoce al director el derecho de darle órdenes dentro de un ámbito definido. Es
por ejemplo la influencia por ocupar un cargo dentro de una organización. Es también una influencia reactiva o al menos neutra. La persona sigue las
indicaciones porque es el jefe el que lo dice…
- La influencia basada en el premio. Se siguen las indicaciones de otro para recibir un premio. En algunos aspectos es la influencia de la Motivación.
Aquí ya la persona no solo responde, sino que sale de ella cierto entusiasmo por seguir las indicaciones. Es una respuesta activa.
- La Influencia por el Liderazgo. En la cual una persona sigue las indicaciones de otra por la persona en sí, por ser quien es. Esta persona es la que
llamamos líder, y se convierte en tal cuando los que le rodean perciben en él ciertas cualidades que despiertan su confianza. ¿Y cuáles son estas
cualidades? Generalmente son la pericia o saber en el ámbito de influencia y la percepción de una intención positiva o voluntad de servicio hacia ellos.
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Aquí la respuesta es igualmente activa, la persona quiere hacer las cosas. Pero en este caso ya no hay un premio definido, sino simplemente la confianza en
que las indicaciones del líder redundarán en nuestro beneficio de alguna manera.
El Liderazgo es fundamental porque nos permite dirigir los equipos. Es una de las herramientas que nos permite, como la motivación, o la disciplina progresiva,
dirigir los cambios en dirección a la consecución de objetivos.
Hay muchos tipos de Líderes. Casi cada artículo que aparece de gestión divide los tipos de Liderazgo en un número diferente. En el momento de realizar este artículo
en Wikipedia aparecen 9 clasificaciones, cada una con un número diferente de tipos de líder. La verdad no sé qué tipo de líder es el mejor o más efectivo,
supongo que depende de la situación, así que hablaré de un tipo de líder, que si no es el mejor, al menos me cae especialmente simpático: el Líder
Catalizador.
El líder catalizador busca cambiar las cosas obteniendo en el camino lo mejor de las personas y que dichos cambios sirvan de catalizador a otros cambios, que
a su vez catalicen nuevos cambios, iniciando de esta manera un "círculo de mejora", de cambios positivos en las personas que redunden en su beneficio.
Dichos cambios, por su parte, mejorarán los resultados, con lo que se facilitará la consecución de los objetivos.
El líder catalizador se esfuerza apasionadamente en transformar (a mejor) las aspiraciones, los ideales, las motivaciones y los valores de sus seguidores.
Para ello:
- Ayuda a sus seguidores a tomar conciencia de la importancia de ciertos problemas, del valor de ciertas metas. En otras palabras, les transmite una nueva
visión de la realidad.
- Hace que sus seguidores transciendan sus propios intereses personales en aras de unas metas superiores (como puede ser el equipo, la importancia del
cliente…).
- Moviliza las necesidades de orden superior de sus seguidores.
¿Y cómo consigue realizar esto el líder catalizador? Valiéndose de tres elementos esenciales: el carisma, la consideración individualizada y el estímulo
intelectual.
El Carisma.
Se ha definido el carisma como "el poder del espíritu sobre el espíritu". Todos tenemos una cierta necesidad de ser guiados por alguien que por su seguridad,
competencia y deseo de buscar nuestro beneficio haya sabido ganarse nuestra confianza. La persona con carisma influye en los demás a través de este resquicio
que busca un maestro, proporcionando un "cierre de circuitos" que asienta la influencia. El carisma se basa en varios ingredientes:
- La confianza en sí mismo. El Líder con carisma cree en sus capacidades para resolver los problemas a los que se enfrenta.
- La Determinación. Para seguir adelante y hacer posible lo que parece imposible.
- El Conocimiento de las Personas. El líder con carisma tiene algo de psicólogo y una gran empatía para comprender a los demás.
- Capacidad de comunicación. Sabe articular mensajes que movilicen el alma de sus seguidores.
- Es un gran motivador. El líder con carisma despierta el orgullo de sus seguidores en sí mismos, les impulsa a superarse, a ser mejores, a conseguir
metas a las que no creían poder llegar.
- Libre de conflictos internos. El líder con carisma no está envuelto en luchas sicológicas internas que lo paralicen. No duda del valor de la visión
ni de la viabilidad de su ejecución. No teme sobresalir. No teme mostrar que es mejor que los demás.
La Consideración Individualizada.
El adjetivo "individualizada" quiere indicar que la consideración se centra en cada uno de los seguidores. Implica un interés genuino por el individua,
por su desarrollo profesional y personal. Esta consideración está basada en una gran generosidad personal y en promover o apoyar lo que ayude al bienestar
y el desarrollo de las personas.
Dentro del carácter del líder catalizador están intrínsecamente integrado un hábito muy importante: el hábito de pensar en ganar-ganar. Ganar/ganar es uno
de los resultados que podemos esperar en una interacción humana. Los paradigmas alternativos son gano/pierdes, pierdo/ganas, pierdo/pierdes.
El hábito de pensar en ganar/ganar es una estructura que constantemente procura el beneficio en todas las interacciones humanas. Ganar/ganar significa que
los acuerdos o soluciones son mutuamente benéficos, mutuamente satisfactorios. Con una solución de ganar/ganar todas las partes se sienten bien por la
decisión que se toma, y se comprometen con el plan de acción. Ganar/ganar ve la vida como un escenario cooperativo, no competitivo. La mayoría de las
personas tienden a pensar en términos de dicotomías: fuerte o débil, rudo o suave, ganar o perder. Pero este tipo de pensamiento es generalmente defectuoso.
Ganar/ganar, en cambio, se basa en el paradigma de que hay mucho para todos, de que el éxito de una persona no se logra a expensas o excluyendo el éxito
de los otros.
La consideración individualizada, precisamente por ser consideración e individualizada encierra dos riesgos en los que el líder puede caer: "el colegueo" y
"la camarilla".
El colegueo surge cuando el líder deja de contemplar en igual medida resultados y relaciones humanas, subordinando los primeros a las segundas. Deja de ser
líder para convertirse en "colega".
La camarilla surge cuando los más próximos al líder llegan a formar un circulo interior o "camarilla" que es percibido como receptor de un trato diferente
por el circulo exterior. Si el círculo exterior siente que existe una diferente e injusta consideración hacia el circulo interior pueden crearse tensiones
que mermen sustancialmente el Liderazgo del líder.
En ambos casos el líder debe esforzarse en dar una consideración justa a cada uno de sus seguidores, para evitar caer en estas trampas.
La consideración individual pronto se convierte en un valor cultural dentro del grupo de seguidores, por lo que los comportamientos contrarios a la misma
tienden a evitarse. Este aspecto, junto al ejemplo del líder y que la consideración de los demás es una necesidad básica humana, genera cambios en la
actuación de los seguidores que pronto se intensifican, prendiendo la mecha del "círculo de mejora".
Estímulo intelectual.
El líder catalizador es intelectualmente brillante y profesionalmente competente. Conoce su oficio.
Tiene mucho de visionario, ve más allá que los demás; y además cuenta con la habilidad de enfocarlos de manera diferente, así como de hallar soluciones
innovadoras.
Además el Líder Catalizador sabe transmitir esta visión a sus seguidores. Es capaz de conseguir que estos tomen conciencia de estos problemas, del valor de
las nuevas metas y de marcarles un nuevo camino. Para ello el Líder Catalizador se sirve de un gran dominio del lenguaje, el uso frecuente de símbolos y
metáforas que expresen sus ideas y de apelar a la parte emocional de sus subordinados, a sus sentimientos.
Su agudeza intelectual y competencia, junto con el carisma, contagian a sus seguidores el deseo de conseguir esta misma excelencia intelectual, por lo que
muchos de ellos inician procesos de investigación y aprendizaje que, evidentemente, redundan en sus propios resultados, beneficio y consideración personal.
Como estos tres aspectos son poderosas fuentes de motivación potencian los cambios, que a su vez potencian este cambio en otros seguidores iniciando
nuevamente el "circulo de mejora".
El camino del liderazgo catalizador
El líder catalizador sabe centrarse intensamente en su pequeño círculo de influencia. Es entre ellos donde busca "prender la mecha", desde donde busca
iniciar el "círculo de mejora". La consideración individualizada hace que en principio el líder catalizador conozca a sus seguidores uno a uno. Es entre
estos desde donde se inicia un crecimiento exponencial de la influencia del líder en más personas, que es la que da posteriormente tanta fuerza a este
tipo de Liderazgo.
Como podemos imaginar el potencial para cambiar y mejorar la realidad del líder catalizador es simplemente inmensa. Personas como Gandhi, Martin Luther
King, la madre Teresa de Calcuta, Roosevelt o De Gaulle han sido líderes catalizadores.
Este estilo de liderazgo no solo busca conseguir los logros, sino también desarrollar las capacidades y talentos de todas las personas con las que se
relaciona, por lo que fomenta y crea un entorno de trabajo en el que estas capacidades y talentos florecen y se desarrollan, contribuyendo en la consecución
de esos objetivos.
En mi entender, este tipo de liderazgo es especialmente adecuado y efectivo en la gestión de una unidad de negocio: restaurante, bar, etc. El gerente o
el director del negocio será especialmente efectivo con este tipo de liderazgo. Debe "encender la mecha"; crear su propio "entorno de trabajo catalizador":
enfocar este aspecto no solo como forma de dirección, sino también como forma de relacionarse con los demás, independientemente del rol o papel adoptado.
En este "entorno de trabajo catalizador":
- Se reconocen las contribuciones e ideas de todos los miembros del equipo.
- Se expresa confianza en las personas y sus capacidades.
- Se muestra confianza compartiendo los puntos de vista y opiniones y apoyando a los demás a compartir los suyos.
- Se solicita y presta ayuda para resolver los problemas.
- Se permite a las personas tomar la responsabilidad en la consecución de objetivos.
- Nos involucramos en la toma de decisiones.
- Nos enfocamos en ser colaborativos, proveer herramientas y eliminar obstáculos para que equipos e individuos consigan sus objetivos.
- Se busca activamente conocer los intereses, preocupaciones, puntos fuertes y débiles de cada uno de los miembros del equipo, para apoyarse en
los aspectos positivos y hacerlos confluir todo lo posible con los objetivos del equipo.
Para el desarrollo de este entorno de trabajo es importante tener una visión de las relaciones personales como relaciones inter-dependientes: "yo soy capaz
de conseguir el objetivo y tu eres capaz de conseguir el objetivo, pero entre los dos lo haremos más rápido y fácil". Es decir, ver el conjunto como algo
mayor que la suma de las partes.
Gracias por leernos y hasta el siguiente artículo.